Todos los días se nos presenta la oportunidad de ser mejores. No obstante, puede que la pasemos por alto. Si desea avanzar en su carrera, necesita ser alguien a quien la gente admire por hacer un buen trabajo y con el que es fácil llevarse.
Siga los algunos consejos de Kate Hanley, autora de «Cómo ser una mejor persona: más de 400 formas sencillas de marcar la diferencia en usted mismo y en el mundo«. Aquí hay extractos de su capítulo sobre cómo ser una mejor persona en el trabajo.
Descubre tus superpoderes
Es fácil menospreciar las cosas que nos salen naturales, porque tendemos a subestimar las cosas que no se sienten como «trabajo duro», pero estas cosas que hacemos con facilidad son superpoderes. Te ayudan a hacer un mayor impacto con menos esfuerzo. Para descubrir sus talentos, pregúntese: ¿Por qué me felicita la gente?, ¿Qué hago muy bien sin siquiera pensarlo?, ¿En que circunstancias mis comentarios siempre son acertados y bien recibidos? Nombrar estos talentos te ayudará a poseerlos y darles un buen uso.
Comparte el escenario
Los autores tienen suerte: disponen de una página de agradecimientos para colocar a todos quienes lo ayudaron a escribir el libro, directa o indirectamente. Es posible que no tengamos algo similar para compartir nuestros agradecimientos, pero podemos encontrar maneras de hacerlo de todos modos. Envía un correo al equipo para agradecer a todos los que ayudaron a lograr una meta en el trabajo, brinda en una cena de celebración y reconoce a las personas que ayudaron a alcanzar ese hito, cuenta una historia en tu próxima reunión sobre las formas en que los colegas contribuyeron a un logro reciente. Se necesita presencia, coraje y confianza para compartir el escenario con otras personas, todos los rasgos que ayudarán a atraer personas y oportunidades de calidad.
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Intenta menos y haz más cosas
Libera tiempo y energía identificando los aspectos de tu trabajo que no tienen mucho impacto. Una buena manera de forzar esa decisión es dedicar más tiempo y energía a las cosas importantes, que son cosas que brindan valor en los resultados financieros o al cliente final (idealmente, ambos). Si se hace bien, naturalmente desplazará cualquier exceso de trabajo que se esté dedicando a las cosas que simplemente no importan.
Se entrenable
Todos tenemos un punto ciego o dos, una debilidad que no podemos percibir. No hay vergüenza en ello. Entonces, cuando alguien en quien confías señala un hábito o un patrón que parece estar frenándote, sé receptivo a lo que tiene que decir y prueba un enfoque diferente. En otras palabras, se entrenable. Resistir la retroalimentación objetiva es una forma segura de quedarse atascado.
Declara el final de la jornada laboral
Pedro Picapiedra sabía que cuando sonaba el silbato el trabajo estaba hecho. Muchos de nosotros no tenemos ese mismo tipo de delimitadores en esta edad de la conectividad 24/7, pero eso no significa que no necesites uno. Incluso si su trabajo exige conectividad, intenta establecer sus propias reglas para cuando finalice oficialmente tu jornada laboral. Su jefe o un cliente pueden enviarle mensajes de texto en horas no laborales, pero usted no tiene que ser el que inicie las conversaciones. Los límites que usted establece lo protegen de la sobrecarga y el agotamiento, y eso es lo mejor para todos.
Muchas de estas acciones no toman más de cinco minutos en implementarse, pero pueden tener un gran impacto.
*Con información de Inc
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