En los últimos años, los drones han pasado de ser una polémica herramienta militar para ataques aéreos a un imán.
Sin embargo, a medida que los drones se mueven hacia la corriente dominante, los emprendedores encuentran formas de emplear la tecnología como el centro de sus ideas de negocios.
Por: Aili McConnon
Ryan Jenson enseñó su potencial empresarial en una demostración de su nueva empresa, HoneyComb. Su idea era utilizar drones para explorar los campos con problemas de irrigación y pesticidas. Si no se detectan pronto, esos problemas pueden costarles a los agricultores miles de dólares.
No obstante, los agricultores no entendieron bien. Jenson contó que le preguntaron: “¿Por qué los necesitamos? ¿Y, de ser así, cómo podemos pagarlos?”.
Por lo general, los agricultores exploran a pie para buscar problemas y cubren aproximadamente cuatro hectáreas en una hora. El AgDrone de HoneyComb puede cubrir 283 hectáreas en una hora, con buena resolución en los mapas en 2D y 3D, que se pueden utilizar para evaluar la mayoría de los aspectos de la salud de un cultivo.
A medida que el dron se elevaba en el cielo, los agricultores veían una pantalla cercana en la que aparecía una vista de los campos abajo, enviada por la videocámara del dron. Una vez que había retornado, vieron fotografías que había tomado durante su recorrido.
Un convertido reciente al AgDrone de HoneyComb encontró una fuga en la irrigación, lo que le ahorró casi 100,000 dólares en pérdidas en la cosecha
“Se encendió una bombilla grande”, dijo Jenson, de 30 años, quien se interesó en el espacio y la ingeniería a edad temprana. Asistió a cursos universitarios a los 14 años y empezó a trabajar en la NASA a los 18. “Cuando se dieron cuenta: ‘Me está usted diciendo que puedo ver cada pulgada cuadrada de mi granja cada vez que quiera?’. Quedaron convencidos”.
Un convertido reciente al AgDrone de HoneyComb encontró una fuga en la irrigación, lo que le ahorró casi 100,000 dólares en pérdidas en la cosecha, y así, muchos casos más.
La compañía, cuya sede está en Wilsonville, Oregón, ahora tiene 16 empleados y ha recaudado dos millones de dólares en financiamiento.
HoneyComb es parte de una nueva oleada de empresa emergentes de drones comerciales. A menudo descritas como “servicios de drones”, estas empresas son tiendas que lo tienen todo y ofrecen tanto los drones para recopilar los datos, como los programas informáticos para analizarlos después.
Si bien la oportunidad se presenta enorme, iniciar un negocio nuevo, centrado en los drones (o sistemas de aeroplanos no tripulados, como se les conoce oficialmente), tiene sus retos, al menos en lo que respecta a las leyes que parecen un blanco en movimiento. Muchas de estas empresas emergentes son pequeñas y ha sido difícil asegurar financiamiento de riesgo.
Se espera que los negocios pequeños reciban el apoyo de corporaciones más grandes, como Amazon, que cuentan con programas de drones ya en ejecución. A finales del 2015, Amazon sacó un video para promover a Prime Air, el servicio que está desarrollando para entregar paquetes pequeños en 30 minutos o menos. Publica libros blancos en su sitio web para proponer cómo integrar con seguridad a los drones al espacio aéreo.