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Incrementando la probabilidad de éxito del emprendedor

El emprendimiento es un viaje lleno de retos, pero con las herramientas adecuadas, el éxito es alcanzable.

El mundo del emprendimiento es un camino arduo y desafiante.

Según Global Entrepreneurship Monitor (GEM), aproximadamente el 90% de las nuevas empresas fracasan en los primeros cinco años. Sin embargo, este echo no debe ser desalentador, sino un recordatorio de la importancia de equiparse con las herramientas necesarias para aumentar las probabilidades de éxito.

La primera de estas herramientas es el autoconocimiento, antes de embarcarse en cualquier empresa, el emprendedor debe conocer sus fortalezas y debilidades.

En un estudio publicado por la revista Harvard Business Review, los emprendedores exitosos a menudo demostraban un auto-conocimiento significativo, lo que les permitía tomar decisiones más informadas y estratégicas.

El siguiente componente es el conocimiento del cliente, según una investigación de CB Insights, el 42% de los emprendimientos fracasan porque no satisfacen una necesidad del mercado.

Como emprendedor, debes entender las necesidades de tus clientes y cómo tu producto o servicio puede satisfacerlas.

Finalmente, un modelo de negocio apropiado para la industria y escalable es esencial. De acuerdo con el estudio de McKinsey & Company, el 70% de las empresas de alto crecimiento aplicaron modelos de negocio escalables que les permitieron crecer rápidamente en su industria.

Desafortunadamente, la formación de emprendedores a menudo es limitada. Según GEM, menos del 20% de los programas de formación se centran en habilidades reales y aplicables; sin embargo, hay programas que si lo hacen de manera efectiva.

Fotografía: Win.gt —Priscilla Du Preez

Uno de ellos, es el Acton MBA de la UFM, un programa creado en Austin, Texas por empresarios exitosos que se enfoca en tres habilidades fundamentales: tolerancia a la incertidumbre, identificación de patrones y pensamiento crítico. Estas habilidades, junto con un autoconocimiento profundo, un entendimiento sólido del cliente y un modelo de negocio escalable, pueden marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.

La tolerancia a la incertidumbre ayuda a los emprendedores a lidiar con los altibajos del negocio. La identificación de patrones les permite prever tendencias y oportunidades. El pensamiento crítico, por otro lado, les ayuda a tomar decisiones informadas que pueden hacer o deshacer su negocio.

El emprendimiento es un viaje lleno de retos, pero con las herramientas adecuadas, el éxito es alcanzable. No permitamos que las estadísticas de fracaso nos desalienten. En su lugar, hagámoslas un recordatorio de que debemos estar constantemente aprendiendo, creciendo y adaptándonos para tener éxito en este emocionante mundo de posibilidades infinitas.

Por:  Hugo Diaz
Director UFM Acton MBA

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