Un gran filántropo y un genio de las finanzas y de la inversión de valor. Desde hace más de 10 años tiene una plaza fija en el podio de los más ricos del mundo. Ha prometido donar el 99% de su fortuna después de su muerte.
Desde pequeño tuvo muy claro qué quería, pues mientras los demás niños jugaban en la calle, él planeaba su futuro. A los cinco años contó a sus padres acerca de sus intenciones a largo plazo, ser rico, y a los seis años empezó a trabajar para ello.
A los 26 años creó su propia compañía de inversiones, Buffett Associates, Ltd.. A los 35 años adquirió la firma textil Berkshire Hathaway cuando estaba a punto de caer en quiebra, y no sólo la levantó sino que bajo esa empresa unificó todos sus negocios y pronto empezó a invertir en compañías de seguros. Berkshire creció tanto que actualmente es dueña de otras 63 compañías.
Su fortuna asciende a más de 79 mil millones de dólares, adora cocinar, juega Bridge en la red 12 horas por semana y nunca viaja en avión privado pese a ser dueño de la compañía de aviones privados más grande del mundo. La sencillez es una de sus características.